Se ha analizado la literatura hasta 1979 sobre el arte rupestre de los indios norteamericanos. Se encontró que se caracterizaba por un alto grado de dispersión, un patrón de crecimiento errático antes de 1950 seguido de un modo de crecimiento exponencial a partir de entonces, y una baja proporción de obras de varios autores. El crecimiento de la producción literaria a lo largo de los años se debió en gran parte a un aumento en el número de autores, mientras que la proporción de autores de artículos cambió solo ligeramente con el tiempo. La proporción de trabajos que tratan temas generales aumentó del 16,4% antes de 1970 al 41,6% a partir de entonces, mientras que la proporción de informes de sitio disminuyó en consecuencia.