La tentación de la plata y la codicia vencian el rigor de la naturaleza, continuaban llegando multitudes, que un comienzo encontraban hospedaje en los ranchos indigenas de los alrededores, avanzado el tiempo no había albergue suficiente, donde por el rigor del frío algunos morian. El establecimiento de la mita, labor obligatoria para los indios en minas e ingenios aumentó la población en forma desmesurada. Nacida la ciudad en 1545, el hospital destino a los indios o naturales inició su construcción el primero de abril de 1555. El nosocomio fuera del aspecto cristiano tuvo una inmensa utilidad Práctica en la recuperación de enfermos y heridos, que una vez curados retornaban a sus labores en socavones e ingenios, evitando la carencia de mano de obra que tanta falta hacia para una regular explotación de los yacimientos de plata. Las obras de don Frnacisco toledo, Comendador de Azebuche, junto a las obras de reforma urbana y organización de establecimientos metalúrgicos (Ingenios) para beneficiar los minerales de plata en la Ribera de Potosí y rectificar las viejas estructuras del virreinato, dan valor especial a su personalidad de excepcionales condiciones humanas. El sexto virrey del Perú apoyó en forma racional y científica la atención sanitaria de los indios imponiendo una reglamentación avanzada en la conducción y régimen del hospital. La creación y organización de los Indios Fiscales y Alguaciles, significa el origen lejano de los principios de Seguridad Social y Solidaridad Humana.

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